Federico Randazzo Abad, director del documental «Atahualpa Yupanqui, un transhumante», comparte su experiencia en la creación de una película que redescubre al icónico artista argentino. A partir de archivos resguardados por la familia de Atahualpa, el documental ofrece un recorrido detallado por su vida, desde sus inicios hasta su reconocimiento internacional.
El proyecto inició cuando Randazzo Abad fue informado sobre la existencia de cintas en diversos formatos no domésticos que pertenecían al legado familiar de Atahualpa. Lo que empezó como un simple interés por digitalizar estos registros resultó en el hallazgo de un valioso material de audio, video, cartas y grabaciones inéditas que permitieron construir un relato más amplio sobre Yupanqui.
La película, que se estrena el 3 de octubre, tiene el desafío de acercar a la audiencia moderna a una figura de la talla de Atahualpa Yupanqui, quien, a pesar de su legado, parece estar algo distanciado de la velocidad y digitalización actuales. «Fue un artista integral en la música, la interpretación, la poesía, y también como investigador y filósofo», comenta Randazzo Abad, refiriéndose a cómo seleccionaron entre tantas facetas la del «transhumante», el viajero incansable que dejó huella en tantos lugares del mundo.
La relación del cineasta con la figura de Yupanqui viene desde la infancia, influenciada por vínculos familiares y el entorno cultural nativista de Coronel Dorrego. La obra y relatos de Yupanqui, tan diversos, han resonado de diferentes maneras en quienes se han acercado a su legado. Sin embargo, muchos elementos de su vida y obra se han conocido a través de interpretaciones de otros artistas.
Randazzo Abad y su equipo se enfrentaron a la dificultad de recuperar este material de archivo, a menudo en formatos obsoletos, demandando ingenio y perseverancia para poder reproducirlos. Esto incluyó colaboraciones con coleccionistas y expertos alrededor del mundo. La búsqueda internacional reveló conexiones de Yupanqui con diversos países, incluyendo viajes significativos a la esfera soviética y Japón, lugares donde también estableció lazos importantes.
Destacan en el documental los testimonios de distintos personajes cercanos a Yupanqui, como Shiro Hamada en Japón y Jacqueline Rossi en Francia, además de expertos y familiares como su hijo Roberto Chavero. También se exploran aspectos menos conocidos de su vida, como su vínculo con Tucumán y las relaciones personales que definieron su trayectoria.
«Atahualpa Yupanqui, un transhumante» promete ofrecer una mirada renovada sobre uno de los máximos exponentes de la música y cultura argentina, invitando al público a revisitar su legado con una frescura y profundidad única. Randazzo Abad cierra invitando al público a dejarse llevar por la experiencia de conocer más de cerca la figura de Yupanqui, no solo a través del documental, sino también pensando y discutiendo su rica herencia cultural.