Redescubriendo Buenos Aires: Un viaje visual al pasado en el Museo Sívori

Redescubriendo Buenos Aires: Un viaje visual al pasado en el Museo Sívori

Ubicado en Avenida Infanta Isabel 555, frente al emblemático Parque 3 de Febrero, el Museo Sívori es el escenario perfecto para esta muestra nostálgica que permite a los visitantes retroceder en el tiempo y presenciar el crecimiento y la transformación de Buenos Aires a través de fotografías que una vez pertenecieron al archivo de la antigua Dirección General de Paseos Públicos de la ciudad.

Teresa Riccardi nos recibe con la misma calidez con que describe la muestra: «Estamos muy contentos aquí en el museo de recibir una exposición como esta, porque nos cuenta un poco de la ciudad, pero también nos cuenta un montón de cómo se trabajan los archivos y cómo funcionan las colecciones de archivos fotográficos.» Para Riccardi, esta exhibición es más que una simple muestra visual; es un homenaje a la historia y el testimonio de una ciudad en constante evolución.

La exposición fue cuidadosamente organizada por un dedicado equipo de curadores compuesto por Luis Triamo, Ibero Tel y Guadalupe, cuya tarea no fue fácil dado el vasto archivo de más de 3.000 piezas en fílmico y placas en su mayoría digitalizadas. «El duro trabajo de los curadores se hace evidente cuando ves la selección final de 50 imágenes,» expresa Riccardi. «El recorte fue temático, centrado en los espacios públicos y paseos, que son fundamentales para la historia de Buenos Aires.»

Entre las piezas destacadas se encuentran fotografías del Rosedal en la década de 1920, la construcción del obelisco y el primer subterráneo de la ciudad. Cada imagen es un portal a un pasado lleno de cambios significativos y narra historias ocultas en los detalles de cada esquina y cada edificio. «Nos parecía muy interesante mostrar también la ciudad desde ese lugar,» comenta Riccardi al referirse a las imágenes nocturnas que retratan los festejos del centenario y las iluminaciones que adornaban la Avenida de Mayo durante esas épocas.

Una de las particularidades de la muestra es su capacidad para resonar no solo con historiadores o apasionados por la fotografía, sino también con familias enteras que visitan el museo y conectan intergeneracionalmente a través de estas imágenes. «Es un ejercicio lindo para activar la memoria y el intercambio entre generaciones,» reflexiona Riccardi, subrayando el papel del museo como un espacio familiar y educativo.

Más allá de las imágenes físicas, el trabajo digital ha sido crucial para hacer accesible el archivo fotográfico en su totalidad. La exposición incluye un acceso a una plataforma digital donde los visitantes pueden explorar las 1.600 fotos disponibles: «Hicimos un trabajo para poder ponerla online y que vos puedas entrar a hacer una muestra en una pequeña tablet,» señala Riccardi, mostrando la integración del patrimonio histórico con las herramientas modernas para su conservación y difusión.

La directora del museo también destaca el vínculo fundamental entre el arte, el archivo y las instituciones educativas: «Esto se construye también con la universidad, porque es un proyecto de escala en el sentido de que tiene historia, el trabajo de las curadoras, los investigadores.» Este enfoque colaborativo refleja un compromiso continuo por preservar y educar sobre el patrimonio cultural de la ciudad.

Mientras el calendario cultural de la ciudad avanza, la Semana Internacional del Patrimonio Mundial, del 13 al 16 de noviembre, se anticipa con una serie de actividades en el museo que invitan a la reflexión sobre la importancia y el manejo de los archivos históricos. Riccardi nos comparte: «Vamos a tener una activación en el museo que va a contar cómo funcionan los archivos del museo, qué tipo de trabajos de inventarios y catalogación se hace.»

«Bueños Aires de Plata» no es solo una exposición de fotografías; es una ofrenda de memoria, nostalgia y descubrimiento, un recordatorio de que muchas de las estructuras y lugares que damos por sentados hoy en día tienen un pasado rico y complejo. Como concluye Teresa Riccardi: «Es un gran documento que nos invita a ver cómo cambió la fisonomía de la ciudad.»

Punto de encuentro cultural

Quienes visiten «Buenos Aires de Plata» en el Museo Sívori no solo se deleitarán con vislumbres de antaño, sino que disfrutarán de la serenidad del Parque 3 de Febrero y de la oportunidad de reflexionar sobre el pasado y el presente de una ciudad vibrante. Para todos aquellos que aman la historia, el arte y la humanidad plasmada en una imagen, esta exposición es un destino imperdible esta temporada.