Daniel Drexler, el renombrado cantautor uruguayo, cruzaba el río de la Plata mientras conversaba con nosotros sobre su esperado regreso a Buenos Aires después de una pausa de tres años. «Estoy acá, cruzando Buenos Aires, después de tres años, imagínate la emoción, las ganas de volver a reencontrarme con un montón de gente querida», expresó entusiasmado desde el barco.
El regreso de Drexler a la capital argentina no es solo un concierto, es un reencuentro con una ciudad que considera parte de su «círculo íntimo de vida». La presentación en Café Berlín, un recinto que él describe como «un lugar ideal para el tipo de concierto» que va a ofrecer, marcará no solo su retorno a los escenarios de Buenos Aires, sino también la presentación en vivo de varias canciones nuevas de su próximo álbum.
Tras la interrupción que la pandemia trajo a los músicos de todo el mundo, Drexler reflexiona sobre este periodo complicado que ha llevado a muchos a revalorar lo realmente importante. «Dicen que cuando terminó la peste negra, en la Edad Media, hubo una orgía que duró meses. Bueno, yo estoy viviendo una orgía musical, una orgía de encuentros, de abrazos. Creo que si para algo sirvió todo este periodo negativo que vivimos, es para aprender a agradecer lo que realmente nos llena la vida», explicó, dejando entrever la alegría y expectativa que siente por este reencuentro.
El nuevo disco de Drexler, que verá la luz en septiembre, sigue alimentando su reputación por ofrecer música que equilibra simplicidad y emoción. Bajo la producción de Fede Wolf, el músico ha explorado nuevas paletas sonoras, incorporando cuerdas, batería y teclados, siempre bajo la premisa de que «si no suma, resta». Esta filosofía de «menos es más» domina su enfoque actual, asegurando que la voz humana, la principal fuente de emoción, tenga siempre su lugar protagónico.
Durante el show en Café Berlín, además de ofrecer adelantos de sus nuevos temas, Drexler promete deleitar a su audiencia con clásicos que el público ha hecho propios a lo largo de los años. «Es una bendición que la gente conozca determinadas partes del repertorio y que te las pidan durante los conciertos», comenta con satisfacción. Al reflexionar sobre cómo sus canciones han encontrado nuevas interpretaciones entre sus oyentes, destaca: «Es lindísimo cuando la gente le da nuevas lecturas a tus canciones. El género de la canción y la poesía permiten que haya desvíos, aperturas hacia otros significados».
El futuro inmediato para Drexler, más allá de Buenos Aires, incluye giras por Brasil, Paraguay, y su tierra natal, Uruguay, con un importante concierto planeado en el Teatro Solís en octubre. Los planes a largo plazo lo llevarán a México y España el próximo año, intentado recuperar su vida pre-pandemia, donde ofrecía más de sesenta conciertos por año.
Con el río tranquilo de fondo y el aire frío que acompaña su llegada a Buenos Aires, Daniel Drexler se muestra preparado para compartir no solo su nueva música, sino también las emociones acumuladas en estos años de distancia. «Lo mejor para este jueves», nos dice, despidiéndose mientras su barco entra al puerto y la ciudad aparece en el horizonte. Las entradas para el concierto ya están disponibles a través de Live Pass y en la página del Café Berlín.
Las expectativas están altas y, con su característico calor humano y su talento artístico, Drexler está listo para ofrecer una noche de música y emociones en Buenos Aires que seguramente tocará el corazón de su público. Como él mismo dice, este no es solo un concierto, es una celebración de la vida y de los encuentros que la hacen significativa.