Tridente presenta «El Árbol Sueña que Canta»

Tridente presenta «El Árbol Sueña que Canta»

El trío compuesto por Mario Díaz, Martín Mancilla y Roberto Calvo lanza su primer disco, una obra que oscila entre la tradición y la modernidad del folclore. En una entrevista, Mario Díaz revela cómo nació este proyecto, las armonizaciones y la selección de repertorio, anticipando detalles del concierto de presentación que se llevará a cabo el 23 de septiembre en San Telmo.

La Casa Mística abre el Árbol Sueña que Canta, el primer disco de Tridente, el trío que conforman Mario Díaz, Martín Mancilla y Roberto Calvo, un cordobés, un pampeano y un porteño, tres grandes músicos que abordan el folclore, cada uno con su impronta por separado, pero que juntos logran una sonoridad que se cifra entre la tradición y la modernidad. Es lo que noté en este disco que me gustó mucho, desplegada en nueve temas de su autoría, cada uno de ellos aportó tres temas, donde ponen música a diferentes poetas, con temas muy lindos y una linda sonoridad lograda, como decía recién. Ellos van a presentar este disco el 23 de septiembre a las 21 en el Auditorio del Palacio El Victorial, esto es en Piedra 722 en San Telmo, realmente es muy interesante lo que hacen. Más que nada de Mario y de Roberto conozco la trayectoria, no tanto de Martín, pero juntos hacen algo muy lindo. Está en charla con nosotros Mario Díaz, y me gustó eso de la tradición y la modernidad, hay grupos en los que encuentro eso, pensaba qué es lo que hace eso, hay folclores de proyección, como se llamaban en los 70 y 80 folclores de proyección, pero nunca sacando el pie del folclore tradicional. Es como ese gato de Juan Faluto que dice de la raíz a la copa, esa es la trayectoria, de la raíz te nutres y después esa proyección precisamente es eso, darle expansión armónica, otro modo de cantar y bueno, esa es la tradición también.

¿Cómo nació la idea del trío, Mario?

La idea del trío nació gracias a Martín, porque él vive en Santa Rosa y nos habló un día diciendo «tengo muchas ganas de que vengan con Roberto y compartan escenario, comemos un asado y nos juntamos». Todo por un asado entonces, eso a veces es determinante. Entonces ahí nomás Roberto le dijo: «¿Por qué no los tres?» Bueno, ahí nomás nos comunicamos vía Zoom y nació esta idea exactamente hace un año, en el mes de agosto. Debutamos en una gira por La Pampa, fuimos a un pueblo chiquitito, un centro cultural hermoso, Colonia Barón, después fuimos a Pico y a Santa Rosa y a partir de ahí no paramos con esta idea de compartir, no solamente la música, sino compartimos una amistad, ganas de encontrarnos, ganas de estar, y bueno imagínate añadirle esto que es nuestra pasión, que es nuestra vida, que es nuestro trabajo, nuestra vocación. Nos encontramos en esto, en la canción, que es un resumen de emoción tremendo, concluye en un disco que salió ahora en agosto, y que estamos transitando y presentando por distintos sitios.

Me gusta la sonoridad que lograron, cómo lo hicieron, digo porque hay un trabajo lindo en las armonizaciones, pero sin estridencia. Las armonizaciones surgen como muy naturalmente todos, incluso en los arreglos también, son sofisticados, están muy bien hechos, pero no hay ningún alarde, todo trabajó al servicio de la canción.

Exactamente, dos cosas quiero decirte. Primero, mi abuelo Marcos, que era criollo de la provincia de Buenos Aires, decía «no tanto gregre para decir Gregorio». Por otro lado, en largas conversaciones que pude tener por suerte con su papá, siempre le decía Yupanqui «póngase detrás de la canción». Precisamente, uno es una herramienta que está al servicio de la canción. La voz, la guitarra, esa expresión está al servicio de la canción. Principalmente, eso es lo que buscamos, sin artificios, que la canción por sí sola salga al frente, y nosotros vamos metiéndole algunos colores y algunas cosas en dosis muy medidas.

Hay una coherencia en el repertorio elegido, son tres temas de cada uno, pero los poetas que están ahí, ustedes no escriben letras, pero hay poetas. Héctor Viñate es un gran poeta pampeano, y los demás temas, aunque distintos, parecen hablar de algo parecido que tiene que ver con la tierra, con una manera de estar, con una manera de ser.

Yupanqui también lo volvemos a citar, porque siempre es como una referencia. Él hablaba de los cuatro asuntos del hombre: el miedo, el amor, la soledad y la muerte. Eso es a lo que uno le canta, el amor en la tierra, el amor fraternal, el amor en la pareja, etc. Eso se refleja en estas historias que cuentan las canciones. La elección del repertorio fue fácil, porque cada uno fue trayendo una canción, nos gusta. Son canciones que veníamos transitándolas de algún modo en nuestro camino solista, y fue muy simple, muy sencillo y además nos daba mucha felicidad compartir una canción del otro, eso facilitó este trabajo y creo que es lo que se nota cuando lo escuchás. Lo he escuchado al disco una y otra vez, compartido con amigos, y ellos dicen cómo se nota que hay frescura, hay elaboración, hay ganas, que es lo principal.

Mario, ¿cómo va a ser la presentación en San Telmo?

La presentación, bueno, vamos a transitar los temas del disco más otras cosas, algunas cosas solistas que siempre nos gusta cantar a cada uno. Vamos a tener invitados también, invitados que nos van a acompañar y que van a engalanar la noche. Va a estar una querida amiga, gran cantora, cantadora, que es Laurita Albarracín, y va a estar un histórico, un referente de nuestra música popular que es Julio Lacarra. Así que prometemos que va a ser una fiesta y vamos a exceder largamente los nueve temas del disco en el repertorio que vamos a transitar.

Lo mencionaste en algún momento de la charla, ¿cómo encaja o qué aire le da Martín al trío? Vos lo mencionabas como el más joven, ¿qué sonoridad le aporta, qué es lo que aporta esta mirada más joven?

Primero que lo retamos todo el día, se porta muy mal, entonces con el tío Roberto, porque nos dice tío a los dos, llevamos casi 20 años en esta. Es joven, pero 20 años como dice el tango no es nada, pero sí es. Bueno, Martín le aporta una visión muy personal, es un gran cantor y un gran melodista con otro desarrollo en sus canciones, con otra poesía como la de Héctor Viñate, que es distinta a la de Rubén Cruz del Negro Rivela, compositores del resto de las canciones del disco. La poesía de Viñate es muy urbana y musical a la vez y Martín ha encontrado la vuelta con las melodías que le puso. Para nosotros es otra vertiente que le aporta a nosotros, que somos más históricos en la manera de componer, en la manera de decir con Roberto, que venimos mamando cosas de otra época. Hay una visión clara que trae él y apoya, fíjate en la canción Rosa Mística con otra rítmica, otra manera de abordarla.

Mario, pensaba en tus trabajos anteriores y que sos músico de raíz folclórica, pero tenés un disco dedicado a Nevia, por ejemplo a temas de Litto Nevia, o un espectáculo con canciones de Serrat. ¿Qué te ha quedado de eso? Porque Nevia también tiene su conversación con el folclore, un coqueteo permanente, no así Serrat, pero ¿qué te queda, de qué nutre en tu música el trabajo de ellos?

En el caso de Nevia, bueno, empieza en el campo del rock, pero después se convirtió en un gran cancionista y a mí me gusta eso, tipos que componen, que tienen unas vueltas en las melodías y nunca pierden la melodía con un laburo armónico. Me siento muy identificado en esa melancolía, en esa manera. También Serrat es el poeta con el cual nos criamos todos y canciones sensibles que forman parte de la banda sonora de nuestra vida. Pero no me das pie para decir algo. La otra vez estaba en un programa de folclore y me pregunta el conductor: “¿Cuáles son tus referentes?” Le digo Jaime Ross, Astor Piazzolla, Troilo, Serrat, Nevia, amo a Milton Nascimento, uno de los grandes músicos del mundo, Mile Davis. Me dice: “¿Cómo? Pero vos no sos un folclorista”. No, no soy un folclorista. Soy un músico que toca folclore.

Exactamente, que es distinto. Entonces puedo disfrutar y si me diera el cuero me gustaría tocar todo, pero uno no va desmereciendo ningún aporte. Esa es la formación tan heterogénea que tenemos tanto Roberto como yo y Martín también, que escuchamos de todo.

¿Qué importancia tiene para el trío que sean tres grandes guitarristas? Roberto es un guitarrista extraordinario, vos también. ¿Qué es lo que le aporta la sonoridad, sobre todo esa base de guitarra?

Una firmeza en la base, imagínate Roberto un gran armonizador y un tipo que ha sido referente para todos en la guitarra. Si bien somos contemporáneos yo siempre admiré su manera de tocar, como acompaña sus rasguidos, sus chasquidos. Como yo siempre le digo a él, todos tenemos algo de Roberto Carlos La Viola, de los tipos que han marcado un paso firme, entonces nos vamos nutriendo y traemos la canción como la toca uno y vamos aportando, y Roberto que es el que tiene la idea más clara respecto de las voces, por su experiencia con Santay y como arreglador vocal, nos va acomodando así como cacheteando un poco la cosa.

El disco son nueve temas y son tres de cada uno y repartieron equitativamente, ¿quedó mucho afuera? ¿Hay material para seguir?

Tenemos, como decimos en Córdoba, para hacer dulce, hermano. Tenemos otro disco ya, de hecho ya vamos a empezar prontito a armar otras canciones que nos gustaría mucho cantar y en algún momento va a derivar y desembocar en un disco nuevo. Nos interesa ir dejando testimonio de todas estas canciones, que están ahí, que se escuchen, que si tienen el don de gustar que las elijan, las canten, es un anhelo.

Nos vamos a ir con un tema que elegí yo, que es Pueblito de Alemania, que tiene letra de Hugo Rivela, que lo nombraste recién, y no puedo dejar de pensar en Manuel Castilla y en Patricio Jiménez porque me remite directamente al tren de Alemania.

Es como un homenaje a eso, ese tema que del Nudo Estalteño. Claro, es un homenaje en definitiva a Castilla, está dedicada al Teuco Castilla, que es el hijo de Manuel, y a toda su descendencia. Manuel dejó dos titiriteros poetas grandes artistas, y la historia refiere a que el papá de Manuel Castilla desempeñaba el oficio de jefe de estación. Ahora queda un caserío, muy pintoresco, prácticamente vive muy poquita gente.

Se insalta, ese camino a Cafayate,

Camino de Cafayate, exactamente. La compusimos hace unos años con Hugo Rivela, que es un poeta salteño, de Rosario de la Frontera, y bueno, con Patricio también estuvimos cantando tres años, desde el año 2000 hasta el 2003. Nos llamábamos el dúo y recreamos cosas del dúo salteño.

Bueno, él murió en 2009.

Claro, sí. Es una zamba hermosa, así que nos vamos a ir con eso, agradeciéndote mucho esta charla y deseándote lo mejor para el 23 de septiembre a las 21 en el Auditorio del Palacio El Victorial, Piedras 722 en San Telmo. Reservas al teléfono 11 44 72 18 39.

El autor, compositor, cantante y guitarrista cordobés Mario Díaz, a propósito de un disco que me encantó, que se llama El Árbol Sueña que Canta, el primer disco de Tridente, el grupo que compone con Martín Mancilla y Roberto Calvo, un guitarrista consumado que tocó con los más grandes. La verdad que es un disco hermoso.

Comentarios

No hay comentarios aún. ¿Por qué no comienzas el debate?

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *