Con la reciente apertura del Mercat Caballito, el paisaje culinario de la ciudad ha ganado un nuevo espacio dedicado a quienes buscan una experiencia gastronómica única y diversa. Ubicado en el segundo piso del Caballito Shopping Center, en Rivadavia 5108, este mercado no sólo revitaliza el centro comercial, sino que también trae una propuesta audaz para el barrio: una curaduría de sabores y productos orgánicos que llevan la experiencia del paladar a un nuevo nivel.
En la apertura del Mercat, Marcelo Pirogovski, uno de sus impulsores, compartió su entusiasmo en una entrevista reveladora sobre lo que este espacio ofrece. «Es un paraíso, este Disney de la buena comida», describió Pirogovski, refiriéndose al ambiente cuidadosamente diseñado con la ayuda del estudio del arquitecto Diego Santos. Con la estética de modernos mercados gastronómicos europeos, el Mercat ofrece una superficie de 1.200 metros cuadrados que invita a los visitantes a explorar un sinfín de opciones culinarias.
El Mercat Caballito no es simplemente un agregado a un centro comercial; es un destino por derecho propio. «Revitalizamos de alguna forma el nuevo concepto de todos los shoppings, los centros comerciales, de generar una experiencia gastronómica diferente», destacó Pirogovski. Nombres destacados como Moisa, con su auténtica comida judía, y Calle Tafí, famosa por sus empanadas tucumanas, forman parte de una oferta que apuesta por la calidad y la rareza de su propuesta.
El espacio está concebido no sólo para saciar el hambre, sino también para estimular la curiosidad de los consumidores. «Nosotros tenemos ahí góndolas con productos orgánicos, pero 70 metros de góndolas con frío, hay 2.000 productos orgánicos», explicó Marcelo, subrayando que el Mercat va más allá de ser un simple punto de venta de comida rápida. Proporciona la posibilidad de realizar compras diarias de productos frescos y especiales, algo poco común en el entorno habitual de un shopping.
Marcelo Pirogovski también hizo hincapié en la arquitectura del lugar, la cual no solo es estética, sino también funcional. «Hay toda una logística para que pueda, en pequeños espacios, se pueda cocinar y armar», señaló. Este cuidado detalle en el diseño permite a los emprendedores gastronómicos ofrecer lo mejor de sus cocinas en un ambiente que promueve la eficiencia y el disfrute del cliente. Thalía Calle Tao, con sus sabores asiáticos, y Lado A, especializado en charcutería, son testimonios de esta diversidad que invita a un recorrido global de auténticos sabores en un solo lugar.
«Tenemos capacidad para 250 personas», comentó Pirogovski, al explicar las comodidades del Mercat. Este espacio no solo está pensado para el disfrute inmediato, sino también para quienes deseen trabajar y conectarse, gracias a sus instalaciones con Wi-Fi y cargadores para dispositivos móviles. La orientación hacia el confort y la modernidad hacen de este nuevo polo gastronómico un lugar atractivo tanto para los vecinos del Caballito como para quienes vienen de otras partes de la ciudad.
La elección de Caballito como el lugar para el Mercat no fue casual. Pirogovski señaló la ausencia de propuestas similares en un barrio con alta densidad poblacional, donde se consume prácticamente de manera interna. «Es casi único para Caballito», afirmó, reconociendo el potencial del mercado para atraer tanto a los residentes locales como a visitantes curiosos de otras zonas.
El Mercat también pretende ser un espacio educativo y de descubrimiento. «Incluso tienen un QR para que puedan ver de dónde viene, la trazabilidad del producto», explicó Marcello, resaltando la importancia de la transparencia en el origen de los productos que allí se ofrecen. Este enfoque no solo acerca a los comensales a sus alimentos, sino que también promueve una conexión más profunda con la comida que disfrutan.
Con una amplia disponibilidad horaria, de 10 de la mañana a 12 de la noche, el Mercat Caballito ofrece un punto de encuentro para desayunos, almuerzos, meriendas y cenas. “Es todo distinto, pero la densidad de Caballito es tremenda. Para mí es muy importante», agregó Pirogovski, resumiendo la esencia del Mercat como un lugar que se integra armónicamente a la vida del barrio.
No cabe duda de que el Mercat Caballito se presenta como una novedosa alternativa dentro del panorama gastronómico de Buenos Aires, ofreciendo una experiencia que va más allá de una simple salida a comer. Tal como afirmara Marcelo Pirogovski, “todo lo nuevo en la ciudad es una ciudad tan rica, con tantas propuestas», y el Mercat hace honor a esa riqueza con su variedad, calidad, y el ambiente que ha creado para el disfrute de todos los que lo visitan.
