«Noestango»: Revolución tanguera en el siglo XXI

«Noestango»: Revolución tanguera en el siglo XXI

«Noestango», el colectivo de danza formado por Milagro Rolandelli, Lisandro Eberle y Ollantay Rojas, llega al Teatro Metropolitano para ofrecer una serie de presentaciones únicas los días 5, 12, 19 y 26 de febrero. Este original proyecto, que desafía las convenciones del tango tradicional, promete encender la avenida Corrientes con un espectáculo que fusiona danza contemporánea y música en vivo, llevando al género a un nuevo siglo.

El nombre «Noestango» evoca el rechazo inicial que el gran Ástor Piazzolla recibió al empujar los límites del tango. Milagro Rolandelli, una de las fundadoras del grupo, explica la decisión detrás de este contundente título: «Un poco el título es como, bueno, el que avisa no traiciona. Si esperabas ver tango, no lo vas a ver. Si te gusta realmente el tango y te parece que tiene que seguir vivo, calcula que te va a gustar». Este enfoque busca abrir un diálogo sobre la evolución del tango como un arte que respira y se transforma.

El espectáculo pone en tensión los modos tradicionales del género, no solo a través de la danza sino también con la música en vivo, interpretada por un quinteto de excepcionales músicos jóvenes: Emiliano y Lautaro Gecko, Matías Grande, Matías Totzola y Manuel Gómez. «Es una música que es increíble más allá de que quieran decir que no es tango. Bueno, acá hay más tango. Es la música de la ciudad de Buenos Aires», afirma Rolandelli, destacando la conexión intrínseca de esta música con el alma de la ciudad.

La conversación con Milagro revela el esfuerzo del colectivo por cuestionar los roles tradicionales en el tango, especialmente en las dinámicas de pareja. «La pregunta de los roles dentro de la pareja y también, sobre todo, abrir la pareja al espacio y a algo que ya no sea la 2, sino en este caso de la 5…», menciona Rolandelli, refiriéndose a la estructura coreográfica del espectáculo que involucra a cinco bailarines que se mueven más allá de las típicas parejas de tango.

El espectáculo no solo trata sobre la danza y la música, sino que también plantea una serie de preguntas sobre el lugar del tango en la actualidad. «Planteamos un poco qué es lo que pasa hoy en día con el tango… Digo, y es algo lógico», reflexiona Rolandelli. Desde su perspectiva, aunque el tango tiene sus raíces firmemente plantadas en el pasado, debe seguir evolucionando y adaptándose para mantenerse relevante.

Milagro Rolandelli cuenta su propia historia de conexión con el tango, desde sus comienzos como una joven apasionada por la danza en Villa Ramallo, influenciada por su abuelo amante del tango, hasta su carrera profesional en Buenos Aires. Este viaje personal refleja una transición más amplia dentro del mundo del tango, que busca mantener el género vibrante y abierto a nuevas interpretaciones.

En cuanto a la música, la selección del repertorio para «Noestango» busca intencionalmente desviar del canon más conocido de Piazzolla, enfocándose en piezas que rara vez se interpretan en vivo. «Nos parecía interesante que se usen piezas que generalmente no se tocan tanto en vivo… es alucinante», comenta Rolandelli sobre la elección musical que acompaña al espectáculo.

Un aspecto crucial del espectáculo es la experiencia única que brinda la música en vivo, tanto para los artistas como para el público. «Es completamente otra cosa, es completamente distinto, la energía es otra cosa», asegura Rolandelli. Esta colaboración con el quinteto en escena realza la conexión entre la música y la danza, ofreciendo una vivencia inmersiva que promete dejar impactado a cada espectador.

Las presentaciones de «Noestango» en el Metropolitan son un llamado a experimentar esta fusión única y a reevaluar nuestra relación con un género tan histórico como el tango. Al llevar este espectáculo a la icónica Avenida Corrientes, el colectivo invita al público a ser parte de una conversación continua y renovada sobre el tango y su lugar en el concierto global de las artes.

«Noestango» no es solo una actuación; es un manifiesto artístico por la diversidad y la inclusión cultural dentro del tango, abriendo nuevas puertas y desafiando percepciones, asegurando que este emblemático género argentino siga evolucionando en el siglo XXI.