El próximo viernes 27 de septiembre a las 18, se inauguran dos nuevas exhibiciones en el Centro Cultural Recoleta. Jahant, del artista Paula Castro, con curaduría de Carla Barbero en la Sala 5, y Censor de Movimiento de Noel de Cándido, curada por Javier Villa en la Sala 6. La entrada es libre y sin costo para residentes argentinos de ambas muestras, pero vamos a hacer foco en una que es Jahant. Ahora más nos va a decir bien Carla Barbero, que es la curadora de esta muestra de Paula Castro. ¿Cómo lo pronuncio? ¿Yajant? ¿Jahant?
-Jajan’t
-Jajan’t, ahí está. Es como, casi una contradicción a la risa.
-Ah, claro. Un agujero separado.
-Claro, es como el cant, es en el tema, marca negación en inglés, está bien.
-Exacto.
-Viene un poco también de la cultura de los memes, que tiene un poco que ver con la exposición también.
-Sí, bueno, contanos un poquito, porque estábamos viendo las fotografías, hay un trabajo ahí que tiene que ver con elementos cotidianos, con cosas de todos los días resignificadas, si se quiere de algún modo, ¿no?
-Exacto, Paula Castro, que es una artista de aquí de Buenos Aires, viene trabajando en múltiples medios, hace pinturas, esculturas, dibujos y demás, pero en los últimos años ha tenido una característica bastante particular de su trabajo, que es como el de inventarse materiales.
-Bien.
-Que también dentro del arte hay una tradición, ¿no?
-Sí, sí, claro. Y ella empezó a trabajar en la pandemia a partir de, bueno, como el encierro doméstico que tuvimos todos, con materiales que fuesen muy económicos y que estuviesen muy a la mano, y así fue como dio con la virulana.
-Bien.
-Este elemento que usamos para limpiar estas fibras de aluminio, y empezó a explorar con ese material, haciendo esculturas y pintura, que tiene una característica muy particular, que es en contacto con la pintura, y su humedad empieza a oxidarse.
-Claro.
-Entonces tiene un aspecto muy peculiar. Y ella, si bien hace muchos años que trabaja también repensando y poniendo en diálogo su obra con la historia del arte argentino, en particular para esta expo trabajó en nuevas esculturas, que abre un poco más la problemática, no solo sea la historia del arte, sino pensarlo, esto, lo cotidiano, ya sea esto, cómo circula la información por WhatsApp, los memes, las series de televisión, como abrir un poco el universo. Pero en definitiva tiene mucho que ver con hacer piezas con materiales que estén al alcance de la mano, muchas estanterías metálicas de comercios que están cerrando, como digo, la virulana, pero también, no sé, muebles que se encuentran en la calle, que son de mimbre y le falta una pata y ella los reutiliza, que hay toda una tradición en el arte de esta reutilización.
-Sí, sí. ¿Dirías que responde a alguna tradición del arte contemporáneo? Es arte contemporáneo seguro, pero me pregunto si es…
-Yo creo que a la tradición de la reutilización o de trabajar con materiales que sean precarios o no tan jerarquizados en la escultura, como podrían ser en la escultura clásica, el mármol, el bronce, además de responder a esa tradición del arte con lo que hay, digamos, creo que tiene un aporte muy particular a la obra de ella que es un poco el disparate, como no solemnizar ese trabajo del invento con el material, sino precisamente llevarlo a un lugar muy cercano, como puede ser el humor, la risa.
-¿Y se vale de muchas técnicas o se está volcando más para… en esta oportunidad se vuelca más para el lado de la escultura, por las fotos que vi, no?
-En esta expo básicamente son casi todas esculturas, excepto por una que es una pintura, una obra en pared, y es donde quisimos hacer foco en esta oportunidad como un proyecto específico para Recoleta, pero su práctica es muy diversa. Eso un poco tiene también la plasticidad de su trabajo, que puede trabajar en diferentes tipos de obra al mismo tiempo.
-Bien. Estamos en charla con la curadora de esta muestra llamada Jajan’t, que se va a poder ver a partir del viernes a las 18 en el Centro Cultural Recoleta en la Sala 5. Su nombre es Carla Barbero. Tomando en cuenta que la mayoría de las obras fueron creadas específicamente para esta sala, ¿cuál va a ser el destino después de estas obras, no? ¿Qué significado van a tener en otro lugar? ¿O si van a seguir en movimiento hacia otro sitio, hacia otra muestra?
-Bueno, felizmente podemos decir que una cualidad bastante particular de los espacios públicos como este es que podemos apoyar la producción específica de obra. Eso como por un lado es un gran privilegio y un honor poder recibir obra que está hecha, pensada para aquí. Luego que tenemos la suerte de que nuestras expos están extendiéndose alrededor de 5 o 6 meses, o sea que pueden ser visitadas durante bastante tiempo por un público muy general. Y en última instancia, ¿qué destino tienen? Bueno, es una pregunta que podríamos decir bastante filosófica, como todo el destino de las obras de arte. Una vez que los artistas los largan al mundo, bueno, ya adquieren un poco de vida propia. Cuando decimos que está hecha específicamente para el lugar, hay algunas que tienen un vínculo físico, material, con el espacio. Hay una de las esculturas particularmente, tampoco quiero spoilear tanto, pero hay una de las esculturas que se asienta sobre una particularidad arquitectónica que tiene la sala. Pero eso no impide en absoluto que en el resto de su vida y recorrido que hagan estas esculturas puedan estar, convivir y habitar otros espacios.
-Carla, ¿cómo hace el artista, cómo hace Paula para abastecerse, quiero decir? ¿Va por la calle con el radar prendido permanentemente, viendo cada cosa que encuentra en la calle puede ser transformada en arte después?
-Exacto, yo creo que más que un método se empieza a desencadenar cuando los artistas intentan sus materiales, como decimos, se empieza a desencadenar algo como una obsesión. Algo que quizás no habías visto, lo empiezas a ver de pronto en todos lados. Entonces, bueno, sí, está muy atenta a lo que se tira en la casa, a los materiales, como digo, del ámbito de lo doméstico, que tenemos habituados a pensar para un uso específico, bueno, ahí se abre un universo de usos posibles, usos plásticos posibles. Y también, como digo, referencias de, no sé, de la cultura más de la televisión o de los sitios de compra-venta de cosas online. Como que empieza a circular la imagen y el poder que puede tener un material para apropiártelo. Entonces digo que se asocia más a una obsesión que a un método clásico de hacer escultura.
-Y más allá de los materiales, ¿qué técnicas se usan a la hora de reunir todos esos materiales? Digo, puede ser, no sé, cortado, pegado, collage, no sé.
-Bueno, podemos decir como que toma un poco del collage o del ensamblar, que es esto de juntar y pegar o asociar cosas que, por momentos, podríamos intuir que son como insospechadas, que son relaciones que podrían ser forzadas. Una esponja floral o una esponja vegetal con una virulana y una estratería, pero tiene mucho de un trabajo material físico del hacer que cosas que quizás no imaginábamos que pudieran estar juntas, se junten, apretujándolas, como le digo yo.
-Querría preguntarte, no sé si te meto un aprieto, espero que no. No, porque yo hablaba de una doble inauguración, que es la de Jahant, pero también la del sensor de movimiento. ¿No estás familiarizada?
-Sí, estoy.
-Sí, me imagino que sí, me imagino que sí. Por eso sé que te puedo preguntar. ¿Cómo dialogan? Es otro acercamiento también a la contemporaneidad, pero desde otro lado, tiene que ver con cosas más electrónicas, que provocan otras cosas. Pero ¿cómo dialogan, de algún modo, las dos muestras?
-Para nosotros, y digo nosotros con Javier Villa, que estamos programando aquí visuales de Recoleta, nos parecía importante, venimos desde las expos de marzo hasta esta parte, trabajando mucho con la relación y la figuración del cuerpo en el espacio, en un sentido muy amplio. En esta etapa del año estamos trabajando cómo esos cuerpos toman una forma más espacial y qué vínculos hacemos con el espacio y el contexto. En el caso de Noël de Cambio, una artista cordobés muy peculiar, de esos artistas que uno podría decir de culto, que tiene una circulación bastante específica su obra, él trabaja con esculturas también de materiales hallados, pero materiales orgánicos, como las ramas de árboles, plantas, y las pone en contacto con los materiales que están en desuso de la electrónica, como los coolers, pantallas, flippers, semáforos, etc. Todo lo que sea un poco en desuso, porque la tecnología, ya sabemos que va a una velocidad enorme, entonces es muy fácil que las cosas vayan quedando en desuso. ¿Cómo se relacionan las expos? Tienen que ver con esta tradición que podemos decir del hacer con lo que hay cerca, a mano, que lejos de ser una limitación puede tener muchísima ambición plástica. Y por otro lado, cierta idea no sólo de la reutilización de material, pensándolo en términos de sustentabilidad, sino de una relación con un contexto mucho más amigable, próximo.
-Ahí está. Entonces hacemos la invitación de ambas muestras. ¿Se pueden ir a ver las dos? ¿Por qué no?
-Exacto. Las dos inauguran el viernes. La idea es esa, en el Centro Cultural Recoleta, allí frente a Plaza Francia. «Jajan’t», por un lado, del artista Paula Castro, y por otro lado, sensor de movimiento de Noel de Cándido.
Agradecemos a Carla Barbero, curadora de «Jajan’t», del artista Paula Castro. Esto va a la Sala 5 del Centro Cultural Recoleta. Y sensor de movimiento de Noel de Cándido, por otro lado, va a la Sala 6. Dialogan, de algún modo, las dos muestras, como recién nos explicó Carla, que es la que entiende de esto.