Recientemente, en la cadena educativa y cultural Encuentro, se presentó una innovadora propuesta audiovisual titulada «Tres Poemas». Esta serie consta de 12 micros de aproximadamente tres minutos cada uno, donde la poesía argentina contemporánea, escrita exclusivamente por mujeres, es protagonista. La actriz argentina Julieta Ortega, conocida por su versatilidad en cine, teatro y televisión, se sumerge en esta nueva aventura dando vida a los textos poéticos con su interpretación única. En una entrevista reciente, Ortega compartió detalles sobre el proyecto y su propia conexión con la poesía.
Para quienes no están familiarizados, «Encuentro» es un canal dedicado a la difusión de producciones culturales y educativas, conocido por su enfoque en propuestas de alta calidad. En este contexto, Ortega destaca la importancia de este medio para dar visibilidad a la poesía, afirmando que «la poesía necesita tener un lugar y un canal como Encuentro. ¿Quién se lo puede dar sin ese Encuentro, no?».
Los poemas que emergen en cada episodio no son solo fragmentos de obras, sino una selección cuidadosa que aborda temas universales como el cuerpo, el dolor, el tiempo, la infancia, la muerte y la soledad. Ortega esclarece que la idea inicial de estos cortos surgió hace aproximadamente cinco años. «Esta es una idea que yo llevé al canal hace muchos años, muchos, cinco», explica. Inicialmente concebida como una serie de programas más extensos, el formato fue adaptado posteriormente a episodios concisos que se intercalan durante la programación del canal.
Uno de los desafíos que Julieta enfrentó fue ajustar su visión original para alinearse con las directrices del canal. «El canal quería que sean micros, que duren no más de cinco minutos», menciona. A pesar de las modificaciones, el núcleo del proyecto permanece fiel a su intención inicial: destacar y difundir la obra de poetas argentinas. La selección de los poemas corrió a cargo de Daniel Azulay, mientras que la producción estuvo en manos de Luma Doc, una productora completamente integrada por mujeres, lo cual subraya el compromiso de Ortega con la representación femenina, no solo delante de la cámara, sino también detrás de ella.
Julieta Ortega también reflexiona sobre el proceso de grabación y la experiencia estética de los micros. «No es realmente un recitado, y tampoco es del todo una acción. Es como una especie de documental, o sea, la voz es la mía, en on y en off», explica. Teniendo un profundo amor por la poesía, Ortega reconoce que este formato ofrece una forma novedosa y accesible de acercar la poesía al público general. Ella misma admite haber descubierto nuevas voces poéticas a través del proyecto. «Todos conocemos a María Elena Walsh o a Pizarnik… pero descubrí poetas, sobre todo las contemporáneas, que yo no conocía».
Esta serie no solo celebra la palabra escrita, sino que también invita a la audiencia a explorar un género que a menudo queda relegado en el ámbito audiovisual. Ortega subraya su deseo de que «este programa provoque eso en la gente, es decir, quién es, qué lindo esto, quién es, quién lo escribió, que vaya a buscar este libro».
Además, Julieta Ortega destaca la calidad del canal Encuentro y su equipo de producción, reconociendo que «para mí Encuentro es una joya. Siempre lo fue desde el primer año, me parecía como que hay cosas que solo pueden estar en Encuentro». La realización de estos microprogramas en cortos días impresionó por la variedad de locaciones y su belleza visual, y Ortega admite su gratitud al observar el resultado final: «cuando lo vi todo entero, que fui a hacerlo soft y todo, dije ok, es muy bello y es mejor de lo que me lo había imaginado».
Finalmente, Ortega se muestra esperanzada en seguir expandiendo este tipo de formatos y plantea la posibilidad de ampliar la selección a poetas de toda Latinoamérica o incluso incluir voces masculinas en futuras temporadas. Sin embargo, destaca la pertinencia y la potencia de la voz femenina en la poesía: «La voz femenina me interpela, obviamente, porque soy mujer, de otra manera».
«Tres Poemas» no solo se perfila como un tributo a las poetas argentinas, sino como un vehículo para que el público redescubra el valor profundo y el impacto emocional de la poesía a través de un medio accesible y atractivo. La serie es un recordatorio del poder de la palabra y de la importancia de espacios que permitan su difusión y apreciación.