Pisar Malvinas: Una Experiencia Inmersiva que Une Historia y Tecnología

Pisar Malvinas: Una Experiencia Inmersiva que Une Historia y Tecnología

En el marco del 40° aniversario del hundimiento del Crucero ARA General Belgrano, el Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur presenta una conmovedora experiencia de realidad virtual que promete transportar a sus visitantes al terreno de las islas Malvinas. Esta iniciativa, denominada «Pisar Malvinas», es el fruto de un intenso trabajo liderado por Federico Ledesma y supervisado por Agustín Ignacio Álvarez, ambos docentes de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM).

La propuesta nació del proyecto final de Ledesma, estudiante destacado de la tecnicatura en Museos 3D y Efectos Visuales, cuyo objetivo era recrear los paisajes de las Malvinas y permitir que el público pudiera “pisar” virtualmente este territorio argentino tan significativo. «La idea era hacer el terreno de Malvinas, generar estos paisajes, y que la gente pudiera ponerse un casco de realidad virtual y estar ahí», explica Álvarez.

Gracias a esta innovadora propuesta, el proyecto fue premiado con la beca Activar Patrimonio, que fomenta la vinculación de la tecnología con el contenido de los museos, permitiendo el desarrollo del prototipo final. El proceso culminó cuando Edgardo Esteban, director del museo y excombatiente, experimentó la sensación de estar nuevamente en las islas y solicitó que la experiencia formara parte de la oferta museística. La emoción generada en Esteban fue un indicativo claro de que el objetivo del proyecto había sido alcanzado: «Trasladar al público al suelo de Malvinas».

El desarrollo técnico de la experiencia fue todo un desafío. Álvarez comenta que partieron de «planos de fotos satelitales y de mapas de relieve», utilizando el motor de videojuegos Unreal Engine para procesar la inmensa cantidad de información y llevarla a un entorno virtual interactivo. Se seleccionaron dos puntos emblemáticos de las islas para la experiencia, el Cerro Cove y Monte London, ofreciendo un recorrido virtual fiel a la topografía real de Malvinas.

Una de las claves de esta experiencia radica en la tecnología de los visores Oculus Quest 2, que permiten «hacer un traqueo de manos». Esto significa que los usuarios pueden interactuar dentro del espacio virtual sin necesidad de controles, lo cual agrega una capa de realidad adicional a la experiencia. «Es decir, no hay una interfaz como un control remoto, sino que la misma mano del usuario es la que traquea el casco y la recrea virtualmente», detalla Álvarez.

La importancia de recrear los detalles auténticos del terreno se ve reflejada también en la colaboración con personas que tienen un profundo conocimiento del lugar. Álvarez destaca la participación de Martín Grignaschi, reconocido por su trabajo como sonidista en la película «Iluminados por el Fuego», filmada en las Malvinas. «El viento que se escucha en la experiencia es viento grabado en Malvinas», señala Álvarez, lo que confiere al proyecto una autenticidad sonora invaluable.

El feedback del público, especialmente de los excombatientes y de quienes han tenido alguna conexión personal con las islas, ha sido abrumadoramente positivo. «Todo el mundo terminó la experiencia muy conmovido», comparte Álvarez. Para muchos veteranos de guerra fue una oportunidad de volver, al menos virtualmente, a un lugar cargado de recuerdos y significados profundamente personales. La experiencia también ofrece una visión educativa y emocional para quienes, ajenos a la vivencia directa del conflicto, desean conectarse con un fragmento vital de la historia argentina.

En cuanto a futuras perspectivas, el equipo planea extender la experiencia para que se pueda acceder desde cualquier parte del mundo mediante una versión descargable desde la tienda de Oculus. Así, personas en el extranjero podrán «pisar Malvinas en el living de su casa», ampliando el alcance de esta experiencia transformadora.

«Pisar Malvinas» no solo es un avance en la utilización de tecnologías inmersivas en entornos museísticos, sino también un puente entre generaciones, uniendo a los veteranos con las nuevas audiencias mediante una recreación virtual que educa, conmueve y preserva la memoria colectiva. La experiencia ya está disponible en el Museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur, ubicado en Santiago Calzadilla 1300, para todos aquellos que deseen descubrir esta faceta única de interacción cultural y remembranza histórica.